¿Quieres vivir en la villa de Coca-Cola, conectado vía radiofrecuencia a tu perfil de Facebook, actualizando lo que te gusta y subiendo tus fotos automáticamente? ¿Divertido? Al menos esto jóvenes israelitas parecen pensar que sí y disfrutan pasar sus vacaciones en el camp de marketing viral. En el video el excitado narrador dice que la experiencia es increíble y celebra que el mundo virtual de Facebook se mueva al mundo real y que tu perfil de Facebook te pueda seguir a todas partes. Los chicos retozan en trajes de baño estimulados por parafernalia Coca-Cola, videojuegos, toboganes, encantados de que toda su información y sus patrones de comportamiento se estén transmitiendo directo a sus perfiles de Facebook y a los centros de análisis de data de Coca Cola.
Los jóvenes israleitas que visitaron el "Coca-Cola Village", un parque de atracciones temático, recibieron pulseras con etiquetas de identifiación de radiofrecuencias (RFID) programadas con sus detalles individuales de Facebook, lo que permitió que a través de lectores con microchips sus fotos y iLikes fueran transmitidos directamente a sus perfiles de Facebook. Más de 35 mil posts fueron emitidos a Facebook a través de estas radiofrecuencias, un banquete de data para estas compañías.
Más allá de la lógica repulsión a un campamento de marketing donde los jóvenes son seducidos con productos de fácil entretenimiento para que sirvan de focus groups, el evento parece ser una especie de experimento social dirigido a promover el uso de la tecnología de identifiación RFID que no ha tenido la aceptación que se quisiera. Colocando un chip RFID una persona puede almacenar sus datos, como su tipo de sangre, sus alergías, sus número de seguro, etc. Claro que esta tecnología de radiofrecuencias también puede servir para poder localizar a una persona en todo lugar y en todo momento. Se han probado también chips de RFID que van dosificando una medicina y esta tecnología podría servir como base para toda transacción financiera, evitando la necesidad de usar dinero físico.